miércoles, 4 de noviembre de 2009

Los Principios de Juegos Defensivos

Son todas aquellas idesa, normas y acciones que debe manifestar cada jugador, cada bloque y todo el equipo, cuando el rival tiene el balón, con el objetivo de recuperarlo o despojarlo de él.

El objetivo principal de todas estas acciones individuales, con el compañero, en grupo, y colectivas es evitar que el rival nos convierta goles, por lo cual sería primordial que la recuperación del balón se realice lo antes posible, en conjunto y lo más lejos de nuestra área o propio arco.

Todo el dominio corporal, todas las acciones físicas, técnicas, reglamentarias y psicológicas orientadas a impedir que el rival pueda tener el balón, construir juego o finiquitar y todo ello apoyado y sustentado en los principios de juego defensivo, que facilitarán esta ardua labor.

Los principios de juego defensivos, es decir, cuando el equipo rival tiene el balón, son:

Ubicación: Saber ubicarse, estar en el lugar propicio para intervenir con éxito. La ubicación debe ser la mayor virtud de los defensas, pues al estar bien situados estarán en óptimas condiciones para anticipar o realizar cualquier otra acción defensiva con éxito.

Anticipación Defensiva: Es intuir y salir rápida y sorpresivamente. Es llegar al balón antes que el atacante e interceptar el balón que le había sido jugado a este por un compañero.



Marcación: Ganar el duelo para despojar del balón o quedarse con él. Es la actitud y movimiento que manifiesta el defensor frente al atacante, con el objeto de quitarle el balón, impedir que lo juegue de manera cómoda o retardar la jugada a través de una óptima posición basal impidiéndole que avance. Al tener marcado a su atacante el defensor tendrá varias ventajas pero la principal es que se evitará el duelo, pues es muy difícil que le jueguen el balón a su jugador si el está ahí, apegado a él.

Saber retroceder: Saber retroceder de manera rápida y fluida, hacia la dirección que el rival conduzca el balón. Es tener un amplio y óptimo dominio del cuerpo, especialmente del juego de piernas, que le permitirá mantener el equilibrio y salir en la dirección correcta. Es saber pararse bien frente al rival que tiene el balón y poder a través de sus movimientos, gestos y actitudes controlar la situación o apoderarse del balón.

Saber barrerse: Saber ir al piso, utilizar bien el quite deslizante, elegir el momento oportuno para realizar esta acción, con éxito asegurado, pues de lo contrario hombre en el suelo es un hombre menos. Saber ir al piso para despojar del balón al rival o recuperarlo, a través de un enganche.

Coberturas: Cubrir al compañero que está en duelo tratando de quitar el balón. Estar siempre ubicado para poder intervenir en dicha jugada, más aún, si el compañero ha sido superado. Cubrir además un espacio en su zona defensiva que ha dejado un compañero, que fue a la marcación de otro rival. Crear el hábito de que cada vez que un defensor es superado, este debe ir a tomar otra ubicación útil.

Despejar hacia las orillas: Toda acción que signifique despejar o alejar el peligro de nuestra área, deberá realizarse con la intención clara y definida de lanzar el balón lejos y hacia los costados; ojalá siempre aéreo, pero si la situación lo permite, jugar dicho balón hacia los costados a un compañero que está ubicado sobre las bandas para salir jugando.

No golpear al rival por la espalda: Enseñar que lo correspondiente en este caso es controlar al rival evitando que se de vuelta, obligándolo a ir hacia su campo, pero sin tener contacto físico agresivo por la espalda del rival y menos aún si este atacante está en contra de la línea de fondo o de banda.

Permanente actitud de vigilancia: Se refiere al estado constante de concentración del jugador, durante todo el partido general y en la jugada en que él está involucrado como defensa, mantenerse atento a lo que sucede con el ataque rival y con el jugador que el debe en ese instante anular, tenerlo siempre vigilado y controlado.

Provocar el fuera de juego: El provocar el fuera de juego pasa por el conocimiento que el jugador tiene de esta regla, y como coordinadamente la última línea defensiva la utiliza como elemento defensivo. Esto requiere convicción, complemento y sincronización de movimientos de todo el bloque defensivo y de un arduo trabajo.

Cubrir y proteger a su arquero: Es la actitud física y mental de proteger a su arquero del atacante rival que viene el al rebote. Es estar desconfiando de su arquero que se le puede soltar el balón o que puede golpear en uno de los postes. Es resumen estar siempre atento al segundo balón.

Retardar la jugada rival: Cuando se está atacando y hay defensores comprometidos y se pierde el balón, inmediatamente quien este mas cerca del rival que recuperó el balón debe ir encima de él, atacarlo, presionarlo para que no juegue el balón o avance. Es aguantar, mantener al atacante en una posición de espera, para que el bloque defensivo se reorganice lo más rápido posible.

Mantener un equilibrio en el sector defensivo: Consiste en mantener como mínimo una igualdad numérica, en relación al equipo atacante. Debemos aceptar que el equipo atacante trate de romper este equilibrio, razón por la cual debemos estar atentos a mantenerlo y si es posible, siempre tener un defensor más.

Control estricto de los rivales en el área propia: Se refiere a que las marcas deben ser muy estrechas en el área propia, pues el rival se encuentra cerca de nuestro arco en posesión del balón. Ningún atacante libre, la marca debe ser a presión.

Despojar del balón al rival en el momento del control: En el momento del control, el atacante está preocupado del balón, toda su atención esta puesta en esta acción lo cual debe ser aprovechada por el defensa. En el momento en que el balón toma contacto con el cuerpo del rival, en ese preciso instante, el defensor debe caerle y despojarlo del balón al despegarse de su cuerpo.

Impedir que el rival realice pases centros y tiros al arco (bloqueo): En nuestro primer cuarto de cancha el rival rematará al arco o atacará por las puntas intentando realizar pases centros, por lo cual, todo el bloque defensivo debe atacar al poseedor del balón, presionarlo al máximo para impedir estas dos acciones.

Intercepción: Consiste en interrumpir la trayectoria del balón, que ha sido jugado por un atacante rival hacia uno de sus compañeros. Para realizar esta importante acción, es preciso estar muy concentrado y atento a las acciones del juego e intuir las acciones defensivas.

Reconversión de ataque a defensa: Tener una correcta actitud y movimiento en el preciso instante en que se pierde el balón, saber reaccionar acertadamente en el mismo instante que se pasa de atacar a defender. Para esto se requiere de una organización preestablecida (por ejemplo: retirada progresiva o reagrupamiento defensivo), de tal manera que dicha acción sea efectiva.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Los Principios de Juegos Ofensivos

Los principios de juegos ofensivos son aquellas normas, ideas y acciones que debe realizar cada jugador, cada bloque y equipo cuando está en posesión del balón, con el fin de generar y crear juego para así convertir el máximo de goles.

Toda la fortaleza y toda la técnica, todo el talento, todas las habilidades y visrtudes con el balón ahora deberán estar al servicio de la táctica, al servicio del juego; es imposible que exista un buen funcionamiento táctico si no se manifiesta en cada jugador una buena relación con el balón, una buena técnica individual y funcional expresada a través de los principios ofensivos, ya sea para mantener el balón, para crear juego o para atacar en busca del gol y convertirlo.

A continuación se mencionarán los principios de juegos ofensivos, es decir, el equipo con el balón:

Simpleza: Jugar simple, no arriesgar el balón buscando una jugada complicada o que signifique riesgo, especialmente en aquellas acciones defensivas o cerca de nuestra área. Ese riesgo hay que asumirlo sólo en el área rival. Jugar simple no significa jugar siempre de primera y a un metro. Jugar simple, significa hacer la jugada correcta en el momento preciso, hacer la jugada que más conviene en ese instante.

Alternancia en el juego: Alternar las acciones de juego. Jugar a lo largo y ancho, jugar corto y jugar largo, jugar a ritmo lento dando seguridad al balón y jugar rápido con cierto riesgo, jugar a ras de piso y utilizar el juego aéreo, realizar variaciones en el juego, de tal manera producir sorpresa en el equipo rival, no jugar todo el partido de la misma manera monótona, rutinaria y predecible.

Desmarcación: Salir de la marca sorpresivamente o atraer marcas, crear espacios con movimientos rápidos e inteligentes para otro compañero y tener la intención permanente de no dejarse marcar o de entregarse a la marca, facilitarle la acción que se desea realizar. Llevar la iniciativa de la jugada ante el rival que lo marca, iniciar la acción siguiente o dar la posibilidad de realizarla.

Ganar la línea de fondo: Lograr llegar con el balón dominado o de un pase al fondo de la cancha y realizar desde ahí un pase gol. Este principio nos garantiza anular el fuera de juego, además de encontrar a nuestros atacantes de frente al arco y por ende a los defensas corriendo hacia un propio pórtico. Llegar a la línea de fondo a través de una jugada individual, de un dos uno, de una pared o lo más usual, mediante una pasada por la espalda del jugador que posee el balón, este apoyo de ruptura es la acción ofensiva que se debe buscar a cada instante, especialemente en las defensas cerradas (superioridad númerica), para provocar descontrol y desorden en la defensa rival.

Hambre y sed de gol: Tener una permanente convicción de convertir, estar siempre en busca del arco rival, ir encima del arquero ante cada tiro, en acompañar cada jugada de ataque, aparecer en el área rival en forma sorpresiva y permanentemente, irrumpir en busca de la oportunidad (oportunismo) estar ahí para meterla adentro.

Dominio de la pared y el dos uno: Realizar ambas jugadas en cualquier parte del campo, pues mediante ellas evitamos el dribling y podemos a través de esta simple acción eliminar uno, dos o varios adversarios al mismo tiempo, Ambas jugadas tienen un efecto mortal en el área rival si se llevan a cabo en forma eficaz. Es necesario dejar en claro que la pared es una devolución de primera del compañero y en el dos uno la devolución es de dos toque (pausa).

Asegurar el balón (posesión del balón): Saber tenerlo y saber para qué. Tener un balón para mantenerlo, para crear espacios, para atacar, para mantener un resultado, para recuperar energías, para cansar al rival, etc. saber mantener el balón haciendo un buen uso de la técnica individual y colectiva. Este principio es la base del buen juego, de las acciones colectivas, de las combinaciones y para ello, se requiere de otros principios de juegos ofensivos que deben manifestarse de manera permanente: movilidad, desmarcación, simpleza, acompañar a quien lleva el balón, cambios de juego, entre otros.

Jugar en amplitud: Trasladar el balón a lo ancho de la cancha, abriendo el juego realizando cambios de juego, para poder ingresar a la defensa rival por las bandas, ocupar todo el ancho de la cancha, hacer uso de todo el frente para poder crear espacios en la línea defensiva y recién ahí penetrarla.

Jugar en profundidad hacia delante - penetración: Jugar a lo largo del campo, hacia atrás y hacia delante (preferentemente), profundizar el juego en busca del arco rival, ya sea a través de jugadas individuales, grupales o colectivas, mediante juego construido o improvisado. Es decir, hacer uso de la penetración en la zona defensiva rival.

Reconversión de defensa a ataque: Atacar apenas se recupera el balón, sorprender con una jugada hacia adelante si es posible o de lo contrario trasladar y mantener el balón para hacerlo en una ocasión propicia. Pasar de ser atacado a atacante, require de una organización preestablecida de la manera que dicha acción sea efectiva, tener elaborada algunas jugadas que se realicen en dicho momento. En el instante mismo en que el equipo recupera el balón, todas las funciones de los jugadores se invierten. Como el fútbol actual presenta a menudos defensas reforzadas, la rapidez de la reconversión defensa ataquej uega un papel primordial, a fin que inmediatamente se pueda lanzar un contraataque veloz que no permita a la defensa contraria una reorganización eficaz. Si el contraataque no es posible, se hará la pausa guardando el balón a fin de elaborar una acción construida e inteligente, la que se acelerará en el momento oportuno, poniendo mucha atención en la precisión de los pases.

Atacar al arquero rival ante un tiro (ir al rebote): Esta es una manera de acompañar la jugada, tener la actitud permanente de ir encima del arquero cada vez que intervenga ante un tiro, pensar que el balón que va a recibir puede soltársele o pegar en uno de los postes del arco. Convicción en convertir, hombre gol.

Acompañar al jugador que tiene el balón: Mostrarse, querer el balón, facilitar el pase al máximo, que el poseedor del balón tenga a lo menos 3 o 4 posibilidades de pase. Existen 3 tipos de ayuda al compañero:

  • Apoyo Común ---> Compañero en cualquier ubicación.
  • Apoyo Sostén ---> Compañero que está detrás.
  • Apoyo de Ruptura ---> Compañero que pasa la línea del balón.

Tranquilidad y rapidez en la jugada final: En este principio, aunque parezca una contradicción, es imperativo que para finiquitar se manifiesten de manera frecuente estas dos acciones, la tranquilidad y la rapidez. Que tranquilidad no se confunda con lentitud y que la rapidez no se transforme en apresuramiento, realizar la acción correcta en el lapso de tiempo oportuno, de tal manera que dicha jugada sea proficiente. Hacer entender al atacante en poder del balón, que él, es el dueño de la acción, él es quien lleva la iniciativa del juego, especialmente si dicha jugada se realiza en el área rival. Amagar siempre frente al arquero, este siempre reaccionará al primer intento o movimiento del atacante.

Improvisación: Crear jugadas sorpresivas y variadas que tendrán como objetivo fundamental sorprender y engañar al rival, sacarlo de su natural esquema, crear confución e indecisión en él con una simple maniobra improvisada inusual y rápida (repentina). Estas jugadas de improvisación pueden ser recursos que se deberían utilizar en determinado momento y por lo cual, es necesario entrenarlas; tacos, chilenas, paloma, túneles, rabonas, amagues, jugarse la individual, entre otras.

Realizar cambios de frente y de juego: Este principio tiene como finalidad esencial cambiar de posición y de perfil a los defensores, moverlos y sarandearlos de una lado a otro, produciendo con ello la posibilidad de que se creen espacios o se logre atacar a los defensores por aquel lugar en el cual tienen menos jugadores. Los principales ingredientes que debe tener este principio son la visión panorámica y la sorpresa.

Tirar o pasar y seguir la jugada: Jamás el jugador que pasa el balón a un compañero o tira al arco debe quedarse estático o en una actitud pasiva, debe acostumbrarse que la jugada con su pase o tiro no termina ahí, sino que por el contrario, debe seguir la jugada ya sea para volver a recibir, atraer marcas o ir a un posible rebote o rechazo del balón que él ha lanzado.

Iniciar la jugada por un lado y finalizar en el otro: Salir jugando por un lado, pero teniendo presente que se tendrá que realizar un cambio de juego para terminar la jugada sorprendiendo por el lado opuesto.

Anticipación ofensiva: Ante cualquier acción ofensiva con el balón en movimiento o de táctica fija, los atacantes deben salir violenta y rápidamente de las marcas e ir al encuentro del balón. Llegar a tomar contacto con él, antes que el defensor, ya sea para recibir, desviar o pasar a un compañero o para convertir.

Movilidad (iniciativa y actitud de querer jugar): Este es el principio de juego ofensivo más importante en la concepción, creación y finiquitación del juego colectivo. Movilidad es querer el balón, es mostrarse, es brindar posibilidades de pase al compañero que lo tiene, es crear espacios, ocuparlos y aprovecharlos mediante la dinámica y ayuda permanente al portador del balón. Este principio de juego cobra mayor importancia bajo la siguiente premisa escencial "el jugador que da inicio a la jugada es el que no tiene el balón".

Saber que hacer con el balón antes de recibirlo: Esto es lo que más debe ser trabajado en niños y jóvenes futbolistas, que antes de tomar contacto con el balón, tengan definido que van hacer al recibirlo (control orientado encadenado a otra acción, pase o tiro de primera).

martes, 27 de octubre de 2009

Los Principios de Juegos Generales

Estos principios de juego son todas aquella acciones técnico-tácticas que realizamos siempre, de manera permanente, durante todo el partido, ajeno a si estamos atacando o defendiendo, si se está en posesión del balón, o lo tiene el rival, y en cualquier secto de la cancha.

Los principios de juego generales son la raiz y el cimiento sobre el cual se va a construir el juego mismo. Son normas o expresiones permanente que deben considerar todos y cada uno de los jugadores durante todo el partido.

A continuación se señalarán los principios de juegos generales que se dan "siempre con y sin el balón":


Respetar y defender la esencia del juego: Respetar a todos, al compañero, al rival. al público, al árbitro y especialmente al balón. Jugar siempre a ganar el partido, pero sin trampas, ganar con buenas armas, ganar respetando el juego y todo su entorno

Visión panorámica (vista de todo el campo de juego): Es el primer principio de juego que debe enseñarse, No basta con mirar, es necesario ver, observar el juego, tener el panorama claro de lo que ocurre en torno al balón y en el campo en general. Todo esto parte de hacer que el niño conduzca el balón con la cabeza levantada (vista arriba), el balón se ve pero no se mira hacia abajo, debe observarse el campo de juego para dar una lectura correcta a lo que ocurre en él.

Participar de la jugada: Estar involucrado con ella, actitud permanente para defender, para atacar y para pasar de una fase a otra; participar de la jugada ya sea defendiendo o atacando. Esto se manifiesta principalmente con el apoyo de sostén o ruptura cuando se tiene el balón y con la cobertura cuando es el rival quien lo posee. Sin dejar de considerar que estas acciones tienen además un acompañamiento o ayuda de otros jugadores a mayor distancia de la jugada misma.

Noción de bloque (jugar agrupados): Achicar el equipo, no tener jamás el equipo largo o cortado, estar junto para defender (achicando espacios) como para atacar (creando espacios).
Ocupar bien el campo de juego: Ocupar bien el campo de juego a lo largo y a lo ancho en toda la cancha. Ocupar racionalmente el terreno, tanto para defender como para ataca, creando espacios o achicándolos, no jugar solo por un costado o por el centro o tener desprotegida una zona defensiva importante.

Anticipación (salir antes, llegar antes): Estar preparado física y mentalmente para llegar antes que el rival al balón. En ese balón que viene o va, ser capaz de apoderarse de él o tener ese primer contacto con él, antes que el adversario. Es intuir, salir en busca del balón incluso antes de ser jugado al rival (anticipación defensiva) o ir al encuentro de él cuando lo juega un compañero.

No dejar dar bote al balón (salir a buscarlo): Ir siempre en busca del balón, atacarlo, ir a buscarlo lo antes posible. No hacerlo, es perdida de tiempo, es cederlo al rival, es no tenerse fe, ni confianza en sus medios técnicos. Salir a buscarlo, sea cual sea su trayectoria aérea o a ras de piso, venga de un compañero o de un rival, es decir atacarlo siempre.

Producir superioridad en torno a la jugada: Producir superioridad númerica en torno a la jugada, tener siempre en torno al balón, más jugadores que el rival, tener involucrados o participando de la jugada más jugadores propios con la inteción de recuperarlo, crear o finiquitar.

Reconversión: Pasar de defender a atacar y de atacar a defender. Saber reaccionar acertadamente cuando el balón cambia de dueño. Elegir acertada y rápidamente la acción que corresponde en ese preciso instante en que se pierde el balón o se recupera, en cualquier parte del campo.

No perder de vista el balón: Jamás dar la espalda a la jugada o al balón, tener siempre la vista en la jugada y mediante ello actuar correctamente. El balón manda, condiciona y supedita todas las acciones que se realizan en el juego, por lo cual su ubicación debe estar siempre muy clara.

Ganar el primer y segundo balón: Luego de cualquier acción o jugada de balón detenido (primer balñon) corner, tiro libre, saque de fondo y también en el saque del arquero, debe tener el convencimiento en ganar ese primer balón y tener el dispositivo y de ganar el segundo, (provenga de un compañero si se ganó el primer balón) o de un rival si se perdió.

Los Principios de Juegos

Los principios de juegos son acciones de juego que cada vez que se realizan, producen beneficios al equipo, tanto en el aspecto ofensivo como defensivo y que por el contrario al no considerarlas, tienen un efecto negativo al equipo.

Estos principios de juego son normas, reglas, verdades e ideas básicas y esenciales del juego, que a través de su ejecución desarrollan cualidades individuales y colectivas que garantizan poder realizar un juego con inteligencia, economía, belleza, eficiencia y eficacia.

Cuando cada jugador conoce y domina los principios, su accionar en todos los aspectos del juego será mucho más fácil, mas fluido y por ende, más proficiente (eficiente y eficaz).

De esto se desprende, que al ser el fútbol un deporte colectivo, cada jugador, cada bloque, y todo el equipo deberá utilizar estas normas en forma permanente y deberá existir una interpretación coordinada y generalizada del fundamento que se requiere aplicar en esa acción determinada del juego colectivo.

La FIFA nos ofrece 8 principios de juego que deberán considerar los jugadores de manera colectiva. Los divide en Principios Ofensivos y Principios Defensivos:

Principios Defensivos:
  • Retardación
  • Equilibrio
  • Control
  • Concentración
Principios Ofensivos
  • Amplitud
  • Penetración
  • Movilidad
  • Improvisación

Para el entrenamiento de estos principios, estos se han desglozados en mas de 50 principios de juegos, que deben ser enseñados al futbolista a través de explicaciones breves, de buenas y precisas demostraciones, de ejercicios con el máximo de realidad, mediante juegos aplicados y a través del juego mismo, de tal manera que el niño y joven internicen el fundamento, lo conozcan, lo practiquen y se manifieste en el juego a través de él.

Hay que tener presente que el niño u joven ya conoce mucho de estos principios de juego, consciente o inconscientemente los utiliza en su juego libre y los expresa a través de su propio vocabulario; "Abrete", "no te la comai", "tócala", "ven ayudarme", "apuralo", entre otros, pero es muy necesario que todo ese conocimiento "salvaje" y esta terminología natural sea guiada y canalizada hacia la enseñanza del fútbol en forma consciente, colectiva y con un apropiado vocabulario técnico por parte del entrenador a cargo.